Quitate la gafa negra y empieza a ver con claridad.
Este fin de semana pasó algo que inspiró esta reflexión; por un momento sentí que tenía puestas unas gafas negras que no me permitían ver con claridad. Ese concepto de oscuridad es algo que recuerdo muy bien porque durante muchos años me sentí así, viviendo en la oscuridad día y noche, donde los momentos de claridad eran muy pocos. Después de mucho trabajo logré destruir esos lentes, o eso pensaba, hasta que este fin de semana me sentí inmersa en esa oscuridad nuevamente; afortunadamente han sido tantos los años que llevo trabajando en mi misma que logré reconocer este error y usar mis herramientas para enmendarlo.
Empecé a conectarme con la gratitud, con todo lo que tengo y he logrado, viendo fotos de todas las cosas maravillosas que he logrado en la vida, de los viajes que he hecho, de mi hija y de esa forma pude volver a ver con claridad. Por eso hoy quiero compartir con ustedes mediante esta reflexión, esa pequeña herramienta para volver a la gratitud por medio de nuestro pasado, porque las fotos son como gasolina par el alma, tienen el poder inmenso de darnos alegría y energía, esa es la reflexión del día.