¿Cómo pueden afectar las heridas en la familia?
Solemos suponer que quienes conforman nuestra familia están llamados a protegernos, a ofrecernos confianza, aliento, amor y seguridad y por lo mismo, nunca esperamos de ellos que nos causen heridas, nos traicionen, nos decepcionen o nos abandonen. Si bien estas circunstancias pueden darse de forma involuntaria, es importante no perder de vista que esto puede tener serias repercusiones:- La traición al interior del núcleo familiar supone desarrollar un trauma para el cual nunca se está preparado.
- El sentimiento de traición en la familia suele ser más doloroso que en otros entornos.
- Este tipo de heridas constituyen un atentado contra la propia identidad.
- Además de compartir historias y un legado emocional, en las familias también se comparten traumas sin afrontar. Los miedos, el estrés y los traumas pueden pasar de generación en generación.
¿Cómo sanar las heridas del alma en la familia?
Aunque a veces creemos que el tiempo y la distancia son la respuesta a la pregunta de ¿Cómo sanar las heridas del alma en la familia? No es suficiente establecer distancia para sanar. Alejarse de quien nos hizo daño puede ser un primer paso, pero además es necesario tener presente las siguientes recomendaciones:- Ofrecer y recibir el perdón de forma recíproca.
- Ser conscientes de que la sanación no puede ser inmediata. Requiere tiempo.
- Esforzarse por mostrar cambio y la intención de trabajar para mejorar las cosas.
- Enfocarse en el presente. Olvidar todo aquello que impide el avance.
- Aceptar e intentar comprender a los demás integrantes de la familia.
- Notar y propiciar los cambios positivos.