Somos más felices cuando recordamos buenos momentos
¿Sabías que cuando evocamos los buenos momentos la actividad neuronal es similar a la que tuvimos cuando vivimos ese momento? El cerebro experimenta casi con la misma intensidad las emociones que sentimos en esos momentos gratificantes y nos genera sensaciones placenteras e incrementa nuestra motivación. Así pues, cuando estamos afrontando situaciones difíciles en nuestra vida o nos sentimos desmotivados, revivir los momentos felices es una forma efectiva de hacer frente a las situaciones retadoras. Así mismo, los recuerdos felices, nos ayudan a fortalecer la capacidad de la resiliencia, a encontrar oportunidades en los problemas y a encarar el futuro con optimismo. Diversos estudios sobre el tema, indican así mismo, que los recuerdos felices provocan sentimientos positivos y refuerzan la sensación de ser amados.¿Cuáles momentos se almacenan más fácilmente?
Las experiencias que se salen de lo habitual, que rompen con la rutina son más fáciles de recordar. Si prestas atención, la mayor parte de tus recuerdos están asociados a las experiencias nuevas, por ejemplo: el primer beso, la primera vez que viajaste, la primera vez que estuviste en el mar. También aquellas experiencias que generaron emociones muy intensas se convierten en recuerdos que el cerebro guarda más fácilmente. Acá están enmarcados los momentos más significativos de la vida, como la boda o el nacimiento de un hijo. De igual forma, las experiencias que involucran los sentidos aumentan las probabilidades de conservar y recuperar los recuerdos. Podemos evocar más fácilmente cuando asociamos una vivencia a un aroma, una canción, una imagen, un lugar, entre otros. Y, finalmente valoramos positivamente aquellos acontecimientos que recordamos que al final fueron gratificantes. Este tipo de recuerdo tiene el mismo efecto de cuando una historia tiene final feliz y le da, de manera inconsciente, una mayor importancia a este tipo de memoria.4 claves para generar recuerdos felices
Convertir los acontecimientos ordinarios y rutinarios en momentos extraordinarios puede ayudarnos a generar más recuerdos felices que puedan ser nuestra fuente de motivación en los momentos de oscuridad. Darle más valor a las cosas simples colmará de emociones positivas tu día a día.- Vive con intensidad el presente. Concéntrate en disfrutar cada momento del presente y absorbe cada detalle de ese momento.
- Estimula tus sentidos. Involucrar tus sentidos en todas tus experiencias hace que puedas recuperar más fácilmente los recuerdos cuando los asocias con música, aromas, sabores o sensaciones.
- Conserva en foto o video los momentos de tu vida. Aunque pasen muchos años, siempre puedes regresar a las memorias de tu infancia cuando observas las fotos. Así mismo, conservar los momentos de felicidad presentes, te permitirán más adelante traer a tu mente los esfuerzos y aprendizajes que te llevaron a vivir ese momento y a afrontar el futuro con ilusión.
- Construye finales felices para las experiencias difíciles. Cuando afrontes días difíciles, regálate una experiencia positiva al final de la jornada. De esta manera podrás valorar esta experiencia de una manera más positiva.