- Afectar tu vida social.
- Propiciar que otras personas te falten al respeto o te manipulen usando la culpa.
- Aumentar tus niveles de estrés.
- Ver afectada tu salud mental.
Cuando cometemos un error o tomamos decisiones que no parecen muy acertadas es normal sentir culpa. La culpa es una de las tantas emociones que experimentan los seres humanos, pero en ocasiones solemos culparnos de muchísimas cosas y ser bastante duros con nosotros mismos. Si con frecuencia te pasa y te preguntas ¿cómo dejar de sentir culpa?, hoy te invito a reflexionar un poco sobre este sentimiento y a conocer algunas recomendaciones para que no se convierta en una conducta autodestructiva.
Cuando hacemos daño a alguien y sentimos la necesidad de corregir lo que hicimos, el sentimiento de culpa puede llegar a ser positivo, pero también puede pasar que te lleve a pensar permanentemente en un mismo hecho, en la manera en la que lo afrontaste y cómo hubieras podido evitar efectos adversos con tu decisión.
En este último caso, es importante que prestes atención a esos sentimientos y analices si estás siendo objetivo al culparte o si estás llevando cargas que no te corresponden.
Sentir culpa permanentemente puede tener muchos efectos negativos en tu vida como son: