¿Sabes cómo sanar el alma? Muchas veces las cicatrices en la piel pueden hacernos pensar que el dolor fue muy profundo y el tiempo de recuperación muy extenso; sin embargo, hay otras heridas que aunque no pueden verse, pueden doler más y tardar mucho más tiempo en sanar, esas son las heridas del alma.
Cuando pasamos mucho tiempo tratando de ocultar aquello que nos duele, el cuerpo busca la forma de hacernos saber que las cosas no están bien a través de síntomas físicos. Por eso, además de curar el cuerpo es importante saber cómo sanar el alma.
Sanar el alma demanda de cada persona la responsabilidad de cuidar de sí mismo y poder compartir con personas de confianza que realmente ofrezcan apoyo y compañía. Hoy quiero invitarte a aprender cómo sanar las heridas emocionales.
7 consejos para aprender cómo sanar el alma
Experiencias tan dolorosas como el abuso sexual o aquellas en las que nos hieren las personas en las que confiábamos y a las que más amamos son las que usualmente dejan heridas profundas en nuestra alma. Presta atención a los siguientes consejos que te ayudarán a sanar.
Acepta la herida
Huir del dolor no te ayuda en el proceso de sanar el alma. El primer paso para superar el dolor es afrontarlo.
Evita reprocharte
Darle vueltas permanentemente a las cosas que pudiste hacer de una mejor forma o de una manera diferente, sólo te aportará sufrimiento y te llenará de resentimiento contigo mismo. Un aspecto muy importante para aprender cómo sanar el alma, es lograr perdonarse a sí mismo.
Permítete sentir
Puede ser que en tu proceso de sanación sientas enojo hacia esa persona que te hizo daño, permítete sentir esa emoción y déjala ir. Guardar ese enojo que sientes solo te causará efectos negativos.
Aprende de la experiencia
La vida nos plantea aprendizajes con frecuencia. Pese al dolor y a que en algún momento puedas sentir que una determinada experiencia solo trajo cosas negativas a tu vida, todas las experiencias pueden aportar positivamente a tu vida. Encuentra un aprendizaje en cada experiencia.
Tómate el tiempo que necesites
Mucho se dice que el tiempo es el mejor remedio para muchas de las cosas que nos afectan. No te presiones para acelerar el proceso. Avanza a tu ritmo.
No tengas miedo de expresar lo que te duele
Si guardas silencio sobre lo que te duele, esto puede agravar las consecuencias físicas y emocionales, también se convertirá en una carga imposible de llevar. Expresar lo que sientes es fundamental para avanzar en el proceso de sanación.
Busca ayuda profesional
Cuando sientas que tus heridas emocionales son profundas y afectan en gran medida tu bienestar, es importante que cuentes con el apoyo y el acompañamiento de un profesional de la salud para avanzar en tu proceso de sanación.
No lo olvides, tratar de enmascarar ese dolor que sientes en el alma, sólo puede agravar las heridas emocionales. No te niegues la oportunidad de afrontarlas y sanar. También te puede interesar: 5 tips de autocuidado emocional para hacer de las emociones tus mejores aliadas
Perdona para ti y libera tu alma
Cuando no perdonamos estamos constantemente reforzando el resentimiento y el dolor que llevamos encadenado en el corazón. Y aunque el perdón no implica olvidar lo que vivimos, tomar la decisión de perdonar nos libera de una carga que no nos permite disfrutar la vida.
Hoy te invito a pensar en la persona que te está haciendo daño y reflexionar cómo le estás dando el poder de controlar tu vida y no dejarte tener libertad en tu alma. Es el momento de que tomes la decisión de perdonar y soltar.
Si quieres conocer más recomendaciones para aprender cómo sanar el alma, te invito a escuchar mi podcast, allí podrás encontrar valiosas herramientas para reconectar con el perdón.