5 aspectos que afectan negativamente la gestión del tiempo
Es posible que en tu rutina se hayan colado algunos hábitos que no resultan ser muy positivos para la gestión del tiempo. Hoy quiero invitarte a identificarlos y erradicarlos de tu día a día. Falta de organización. Si no sabes qué es prioritario, qué tareas debes terminar, cuánto tiempo tienes para hacerlo, entre otros, es posible que tengas que dedicar tiempo adicional para saber cómo distribuir las actividades pendientes. La organización es clave. Poco aprovechamiento de las herramientas. Existen muchas herramientas que pueden ser eficientes en la gestión del tiempo; sin embargo, si no las usas correctamente o desconoces su correcto funcionamiento, es posible que pierdas tiempo. Procrastinación. Posponer frecuentemente las actividades aún sabiendo que debes realizarlas se convierte en un hábito muy perjudicial. Además de generarte estrés al momento en que requieras finalizarlo, es probable que la calidad del producto final no sea la esperada. Hacer de la tardanza un hábito. Las personas que no planean el uso del tiempo, con frecuencia se tardan más de lo habitual en cumplir con sus actividades o citas. Esto además de afectar negativamente el cumplimiento de las tareas, puede llegar a afectar tu reputación. Acumulación de tareas. Acumular tareas sin culminar conlleva a tener que hacer esfuerzos extra y que en muchos casos esto no sea suficiente para completar las tareas pendientes. Priorizar las tareas y organizar el tiempo es la clave. Un poco más de conciencia en torno al tiempo que empleas para realizar determinadas actividades y una correcta priorización de las tareas pueden marcar la diferencia.¿Cómo mejorar la gestión del tiempo?
Si has identificado algunos problemas en la gestión del tiempo, te invito a prestar atención a las siguientes recomendaciones para mejorar tus hábitos y aprovechar mejor uno de los recursos más valiosos que tenemos: el tiempo.- Lleva un registro de tus tareas y el tiempo que te toma cada una.
- Planifica tus actividades a partir del tiempo real que te toma realizarlas e incluso puedes calcular un tiempo extra teniendo en cuenta interrupciones o imprevistos.
- Lleva un registro de las tareas pendientes, a veces la memoria puede jugarnos malas pasadas, por eso es mejor que recopiles todas las tareas en una lista que tengas a la mano.
- Establece prioridades. De este modo podrás enfocar tus esfuerzos en tareas realmente importantes.
- Identifica y elimina esas actividades que te roban el tiempo que requieres para cumplir con tus tareas.
- Identifica el momento del día en que sueles ser más productivo y dedícalo a las tareas que demandan mayor concentración.
- Aunque solemos pensar que optimizamos la gestión del tiempo al hacer varias cosas al mismo tiempo, en muchas ocasiones lo que pasa es que iniciamos muchas tareas pero no concluimos ninguna. Mejor concéntrate en cada actividad hasta completarla.